fbpx

Dedica un poco de tiempo a ser feliz – Cómo vivir ratitos slow

Movimiento Slow

Untitled

Nota: Aunque os suene sectario, los que me conocéis un poco sabréis que soy una persona muy práctica y obsesionada con la productividad. Os recomiendo que dediquéis un poco de tiempo a leer esto, porque si a mi me ha funcionado, a vosotros también.

Desde hace varios meses inicié sin darme cuenta un movimiento personal hacia la autosuficiencia y realización personal que se ha ido convirtiendo en un aprendizaje y experimentación que me conecta durante unas horas con una vida slow.

Esto coincide con el hecho de empezar a vivir sola, que va a cumplir un año ya y que ha sido la causa de tener mucho tiempo para pensar sin distracciones. Sin nadie que vigile o sea testigo de tus actos empiezas a sentirte dueño de ti mismo y de lo que haces, que sumado al hecho de que tus gastos se multiplican, te hace ser doblemente consciente de en qué inviertes tu tiempo.

Hace varios años leí un libro que me hizo pensar pero que no entendí tanto como hago ahora, y después de tanto tiempo me vienen a la cabeza muchas de sus frases. Se trata de Elogio de la Lentitud, de Carl Honoré. Una reflexión sobre la vida que vivimos, sin tiempo para hacer lo que nos gusta y mucho tiempo desperdiciado en cosas que realmente no apreciamos. Sobretodo incita a preguntarse qué vida quieres vivir y si tu vida actual se parece a ella.

Me gustó porque no es la utopía de una vida completamente slow, sino que tiene una visión realista. Tenemos prisa y no vamos a dejar de tenerla, sin embargo, podemos optimizar nuestro tiempo para tenerlo todo, sólo hace falta pensar un poquito y organizarnos bien.

El ejemplo perfecto es el tiempo que dedicas a ver la tele, dedicado totalmente por inercia, que no te llena, no te hace sentirte realizado, y al acabar estás completamente igual a como empezaste. Nuestras actividades slow deben ser algo que realmente queramos hacer, algo a lo que prestemos atención y que al acabar nos sintamos realizados. El final de la frase «si tuviera más tiempo haría…». Bien pues ese tiempo lo tienes y tu eres el que decide en qué lo emplea.

No voy a entrar en el tema del tiempo porque necesitaría otro post. Todos tenemos el mismo tiempo, pero parece que los más ocupados sean los que peor se organizan.

Os voy a contar la fórmula que ha funcionado para mi y ojalá funcione para vosotros también.

Todo esto empezó tras muchos fines de semana trabajando de lunes a domingo simplemente porque siempre tenía algo que hacer. Nos engañamos pensando que somos más productivos cuantas más horas dediquemos a lo que tenemos que hacer, pero no es cierto, llega un punto en que no tenemos nuevas ideas y nos estancamos, de modo que una inversión de tiempo en otras tareas tiene el beneficio de mayor concentración y resolución cuando volvemos al trabajo. Demostradísimo.

Pues bien, la clave es planear el tiempo de ocio como si fuera una tarea más de la semana. De modo contrario no tendría su espacio, porque siempre hay algo aparentemente prioritario que necesitamos hacer.

El día dedicado a ello son los domingos, el día que está socialmente justificado que no seas productivo y que está en tu mente también. Cada domingo lo dedico a una de mis nuevas aficiones y aunque me quede con ganas de más, debo esperar al siguiente domingo para continuar. Os sorprenderíais cómo los domingos pasan de ser ese día que vagueas lamentando que llega el lunes al día que estás esperando durante toda la semana.

Durante este año he creado mi propio huerto urbano del que muchas veces me alimento, he hecho con mis manos atrezzo para mis fotos con patchwork, fieltro y punto de cruz, he aprendido a hacer jabón y la semana que viene voy a probar a hacer pan! En mi vida había hecho tantas cosas teniendo tan poco tiempo.

Es cierto lo que decía Carl Honoré en su libro, las actividades slow te conectan contigo mismo y hacen sentir más feliz mientras las haces, y cuando las disfrutas te hacen apreciar el valor de las cosas hechas sin prisa. Sino, ya os contaré cuando me haga una ensalada de mi cosecha y me lave las manos con mi jabón.

Iba a escribir hoy la receta del jabón, pero ya se ha quedado un post muy largo, lo dejo para el próximo día!

Espero saber de vuestras experiencias en los comentarios!

Aquí os dejo una forma sencilla de tener todos tus sitios favoritos en un mismo lugar y poder leer fácilmente cuando hay algo nuevo.

También podéis suscribir vuestro email dándole «Follow» en la esquina inferior derecha de esta misma página y te llegarán las actualizaciones periódicamente a tu email.

O seguir mediante Bloglovin.

Un placer verte por aquí una vez más.

♥♥♥